Paradojas del fútbol

Es curioso escuchar en una emisora de radio, al Presidente del Motril Club de Fútbol, diciendo que los jugadores de Tercera División de los grupos de Andalucía, irán a la huelga. Puesto que estamos cansados de escuchar, "que esa categoría no se puede considerar profesional, ya que no existen los contratos".
Entonces señor Presidente, le recuerdo que para acogerse al derecho de todos los ciudadanos españoles, reconocido por la Constitución. Se debe de ser trabajador.
Yo, estoy de acuerdo que la situación económica, que atraviesa nuestro fútbol, no es la más idónea. Que al campo no va nadie. Que los directivos, roban tiempo a sus familias para dedicárselos al club. Pero, realmente ¿no han sido ustedes los que han llevado a los clubes a ese estado?
No hace tanto, muchos de los que ahora jugamos en veteranos, eramos los jugadores de Tercera División. Eramos los que jugábamos en campos de tierra. Los que realmente no cobrábamos un duro por jugar. Ahora, ustedes son los que firman jugadores, ofreciéndoles el oro y el moro, quizás esta temporada, no. Pero, ¿y estos años atrás?. Sin ir más lejos, ¿de dónde vienen las deudas del Motril, de ahora?.
A parte, ¿usted cree que nadie va a pagar para ir al Escribano Castilla, a presenciar el espectáculo que sus jugadores dan?. Las gallinas sin pescuezo, correr con más sentido que sus jugadores.
¿Pagarles?. Quizás sus jugadores, deberían pedir perdón a los aficionados por el espectáculo bochornoso que ofrecen semana, tras semana.

Noche de ilusión, mañana de desencanto

Como todos los años, el día 5 de enero por la noche, las calles se llenan de infinidad de niños para recibir a Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente.
Todos tienen sus esperanzas puestas, en que les traigan infinidad de juguetes. Pero este año, cuantos padres no se habrán encontrado con la pregunta tan comprometida de "Papa, si yo he sido bueno ¿por qué los Reyes no me trajeron nada?"
En esos momentos, los padres dudaran, entre si romper del todo el encanto y la ilusión de sus hijos confesándoles quien son los Reyes, y por que no le han traído nada, o por el contrario, decidirán inventar una mentira piadosa. Claro está, todo ello después de tragarse las lágrimas y sentirse un fracasado/a.
Gracias señores políticos, ustedes son los únicos culpables de llevar el país a una situación tan extrema, que ni la ilusión de los niños esta asegurada.
Gracias por darnos unas Navidades llenas de amor, ya que eso ha sido lo que muchos padres han podido dejar bajo el árbol en el día de Reyes, a sus hijos.
Gracias, por hacernos sentir a los padres, unos villanos con nuestros propios hijos.
Seguro, que ninguno/a de ustedes sentirá esa sensación. Seguro que la ilusión de sus hijos sigue estando asegurada.

La vida sigue igual

La vida sigue igual. La pasada madrugada del día 2 de enero, mientras que la inmensa mayoría de los considerados "ciudadanos de primera o de los países desarrollados", nos recuperábamos de una noche de excesos. 35 personas se jugaban la vida en una patera, para ver cumplido su sueño. Un sueño de una vida mejor, de poder mandar dinero a los que se quedaron atrás, en su país.
Pero, que les esperaba en realidad. Un triste calabozo (aunque se empeñen en llamarlo Centro de Acogida de Inmigrantes), y luego largas caminatas por las playas españolas, vendiendo Cds.
Claro, para ellos es mejor eso que morir de hambre en su país, o esperar que unos matones decidan poner fin a sus vidas, por no ser de la etnia correcta.
Para cuando se darán cuenta los gobiernos, que la única forma de acabar con este problema, es poner solución en el país de origen.